Tensión-Cansancio
Aunque este estado de ánimo es característico (o más común) en la segunda parte del día, después de varios días súper productivos, tiendo a sentirme totalmente agotada y, peor aun, muy desmotivada.
Suelo darme permiso (y mi trabajo usualmente me lo permite) de tomarme unos días off de mis actividades cotidianas, para poder descansar, sobre bobear o hacer cualquier otra cosa que ocupe mi mente en algo más.
No obstante, en muchas ocasiones, me toma más tiempo recuperarme de este agotamiento mental, físico y emocional. Por lo que, a pura fuerza de voluntad, me levanto de mi cama, me alisto (desde arreglarme el pelo hasta usar zapatos fashion (no chanclas jajaja)), preparo mi zona de trabajo, hago mi agenda de pendientes y comienzo a avanzar con las tareas más urgentes.
Durante el día, intento distraerme lo menos posible con las redes sociales u actividades que no estan dentro de mi agenda y fijo una hora para terminar mi jornada.
Ponerle un “fin” a mi día laboral, me ayuda para establecer un espacio de esparcimiento al final del día, que últimamente estoy utilizando para hacer ejercicio porque me ayuda a despejar la mente.
Les mentiría si les digo que eventualmente no vuelvo a ese estado de Tensión-Cansancio pero me esfuerzo por salir de él, una y otra vez.